En muchas ocasiones, varios de nosotros nos enfrentamos a situaciones complicadas. Una de ella es cuando alguien está sufriendo un ataque de pánico.
Estos ataques son oleadas repentinas e intensas de miedo, pánico o ansiedad. Son abrumadores y sus síntomas pueden ser tanto físicos como emocionales.
Muchas personas con ataques de pánico pueden presentar dificultad para respirar, sudan abundantemente, tiemblan y sienten el latido de sus corazones.
Algunas personas llegan a sentir dolor en el pecho y una sensación de desapego de la realidad o de sí mismas durante el ataque, que les hace pensar que están teniendo un ataque al corazón. Otros han reportado sentirse como si estuvieran teniendo un accidente cerebrovascular.
Estas situaciones pueden dar miedo y es posible que la persona que lo está sufriendo te golpee rápidamente. Ante estos acontecimientos podemos tener temor y no sabemos cómo reaccionar. Por eso te traemos unas pautas recomendadas por diversos expertos, donde nos cuentan qué tenemos que hacer para que la persona, que está sufriendo ese ataque, sufra lo menos posible.
Por un lado, la empresa estadounidense dedicada a los seguros de médicos, Cigna, expone que ante todo debemos mantener la calma.
En primer lugar, traslade a la persona a un lugar tranquilo y se recomienda que si la persona suele tomar medicamentos durante un ataque, debe ofrecerlos para reducir dicho ataque. Otros pasos a seguir es hablarle con frases cortas y simples, ayudar a desacelerar la respiración de la persona respirando con ella, contar lentamente hasta 10 o ayudándole a concentrarse pidiéndole que repita una tarea simple pero físicamente cansadora, como levantar los brazos por encima de la cabeza.
Estos consejos son para las personas acompañantes de las que están padeciendo el ataque.
Respecto a las personas que tienden a adolecer este trastorno, tenemos otras sugerencias ofrecidas por Healthline Networks, un sitio web estadounidense y proveedor de información médica.
Para empezar, debe reconocer que está teniendo un ataque de pánico. Luego, cierre los ojos y use la respiración profunda. Después, realice ejercicios de relajación muscular e intente echar volar su imaginación para encontrarte en un lugar feliz. Finalmente, lo más importante es mantener la calma y dejar a un lado los pensamientos negativos.
Asimismo, otro consejo útil es decirle como las siguientes:
• "Puedes superarlo".
• "Estoy orgulloso de ti. Buen trabajo".
• "Dime qué necesitas ahora".
• "Concéntrate en tu respiración. Mantente en el presente".
• "No es el lugar lo que te está causando las molestias; son tus pensamientos".
• "Lo que sientes es atemorizante, pero no es peligroso".
Al seguir estas pautas, se está ayudando a:
• Reducir la cantidad de estrés en este tipo de situación muy estresante.
• Evitar que la situación empeore.
• Ayudar a poner un poco de control en una situación confusa.